Si quieres enseñarle a tu perro a “hacer el osito” o “pedir por favor” sigue nuestros consejos…

Nivel de dificultad: fácil

Nos aseguramos que el perro nos está prestando atención y para conectar con él le entregaremos unos cuántos premios de comida a cada inicio de sesión.

Antes de empezar a trabajar la habilidad del osito, nos aseguramos que el perro no tiene problemas de salud ya que la postura requiere un esfuerzo físico adicional de sus cuartos traseros.

Desde la posición de sentado, cogemos un premio de comida y guiamos el perro a que levante sus patitas delanteras del suelo. No exigiremos altura ni precisión, sólo que mantenga las patas traseras en el suelo y levante un poquito las delanteras.

Nada más levantar las patitas delanteras, le felicitaremos y le entregaremos el premio.

Si el perro se levanta o intenta saltar para coger la comida, ignoramos su comportamiento y le decimos que se siente. Una vez sentado, le premiaremos.

Este ejercicio se tarda en construir, no tengas prisa. Para empezar el perro deberá aprender a sentarse apoyado solamente en sus patas traseras y permanecer en esta postura sin perder el equilibrio. No le exijas precisión.

Una vez el perro consiga permanecer en la posición, le pondremos nombre a la habilidad seguido del gesto para que poco a poco el perro se acostumbre a la nueva señal.

Es muy importante premiar cada pequeño acierto y cada intento del perro ya que requiere un esfuerzo físico importante.

Recordamos que las sesiones de entrenamiento deben ser muy cortas, de menos de 5 minutos.

No le regañamos,  el entrenamiento debe ser algo divertido para el perro y para el dueño.

Si nuestro perro presenta signos de cansancio, fatiga, empieza a ladrar, jadear u olisquear el suelo paramos.