Juegos para divertirse y aprender en verano (Parte III)

Juegos para divertirse y aprender en verano (Parte III)

Vamos a enseñar a nuestro perro una alternativa a los saltos, a los ladridos, algo que funciona como herramienta para la llamada y para terminar un juego de niños que les encanta ¿comenzamos?

 

Juego 1: Targets de mano

Empezamos en casa, sin distracciones alrededor, vamos a sentarnos para estar a la atura de nuestro perro y es importante que antes hayamos separado premios de comida con nuestras manos para poder hacer los ejercicios. Con el perro sentado delante nuestro vamos a acercar la palma de nuestras manos paralelamente a su hocico, haciendo un ángulo de 90 grados a su nariz para que el perro gire naturalmente la nariz en busca del olor a comida que tendrá la palma de nuestra mano y le felicitaremos por esa acción. Inmediatamente premiamos con comida y quitamos la mano. Repetimos, llevamos nuestra mano abierta con la palma mirando hacia el perro paralelamente a su hocico haciendo un ángulo de 90 grados con su nariz, y al momento que el perro gire la nariz (y lo más probable) es que toque con su nariz la palma de nuestra mano, felicitamos y entregamos su premio. Repetiremos este ejercicio al menos 3 veces al día, 5 repeticiones cada, durante una semana. Es importante que el perro entienda lo que se le pide y no se frustre, para eso colocaremos y quitaremos la mano con cierta agilidad, para que al perro le llegue un pequeño estímulo olfativo procedente de la palma de nuestra mano y su reacción inmediata sea girarse hacia ese foco de olor y naturalmente toque con su nariz nuestra mano. Pasados unos días de realizar con éxito este ejercicio le diremos “toca” antes de empezar para marcar verbalmente el comportamiento. Este ejercicio es muy válido para evitar saltos indeseados, como herramienta de llamada, para enseñar otros comportamientos prescindiendo de la comida como medio de guiado, y muchas más cosas.

 

Juego 2: Escondite

El siguiente ejercicio os ayudará a mejorar el vínculo y la llamada, muy fácil: deja a tu perro en una posición de sentado o tumbado y vete a esconderte. Si tu perro todavía no aguanta estar sentado esperando pídele ayuda a alguien que le sujete, y si no, hazlo cuando él esté durmiendo. Te recomiendo al principio se lo pongas fácil y te escondes por ejemplo detrás de las puertas. Una buenísima idea es premiarle solamente con elogios, sobre todo si tenéis ya un muy buen vínculo o si lo que quieres es utilizar menos reforzadores externos (comida, juguetes). Si lo que quieres es crear vínculo o repararlo porque tu perro “pasa” de ti, entonces si te recomiendo que le esperes con algo que le interese mucho y poco a poco lo mezcles con premios de caricias y felicitaciones.

 

Tenéis bastante trabajo esa semana, no os olvidéis de compartir vuestros progresos y dudas en nuestras redes sociales.


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